-UNA MUCHACHA DE LA PROVINCIA-

CONOCÍ A LORETA DURANTE EL INVIERNO DEL 86, CUANDO ESTUDIABA EN VALDIVIA Y EL GRAN PANORAMA UNIVERSITARIO ERA IR POR LAS NOCHES DE SÁBADO A LAS FIESTAS DEL DAE, CRUZANDO EL PUENTE HASTA LA ISLA TEJA Y EL BARRIO UNIVERSITARIO. LORETA ERA PARTE DEL GRUPO DE AMIGOS QUE NOS JUNTABAMOS SIEMPRE EN ÉSE LUGAR Y AL FINALIZAR LA NOCHE PARTÍAMOS EMPAREJADOS AL PARQUE SAVAL O LLEGÁBAMOS HASTA LA PELDAÑOS A TOMARNOS UNOS TRAGOS Y TERMINAR EN LA VALDIVIANA REPONIENDO NUESTROS CUERPOS, FRENTE A UNA HUMEANTE CAZUELA DE AVE.

ELLA TENÍA ENTONCES COMO 20 AÑOS Y ERA UNA DE LAS HIJAS DEL PINTOR TITO LOMBARDI, UN ACUARELISTA VAGABUNDO Y SOLITARIO QUE VIAJABA POR TODA LA PROVINCIA VENDIENDO SUS CUADROS. LORETA HABÍA DEJADO LOS ESTUDIOS DE VETERINARIA Y ACOMPAÑABA A SU PADRE EN LAS EXPOSICIONES. SU CARÁCTER INQUIETO Y ESPONTÁNEO LE HIZO CONOCER A LA MAYOR PARTE DE LOS ARTISTAS Y COLECCIONISTAS QUE CIRCULABAN ALREDEDOR DEL TALLER DEL VIEJO ACUARELISTA Y SU MARAVILLOSO CUERPO CARGADO CON TODA LA VITALIDAD DE LA ADOLESCENCIA SIRVIÓ DE MODELO A VARIOS PINTORES LOCALES Y FUE PARA MI, UN ESTUDIANTE DE DISEÑO QUE HABIA PINTADO YA SUS PRIMEROS CUADROS, LA GRAN INSPIRACIÓN DE ESOS AÑOS.

A LORETA SIEMPRE ME LA ENCONTRABA EN EL CENTRO POR LAS TARDES DESPUÉS DE CLASES TOMANDO UNA CERVEZA EN EL PAULA, A VECES SÓLA, A VECES ACOMPAÑADA DE AMIGOS QUE SIEMPRE ESTABAN EN UNA MESA AL FONDO DEL RESTAURANT. DURANTE LA SEMANA ÉRAMOS PROTAGONISTAS FRECUENTES DE LAS LARGAS NOCHES DEL IPV , EL DAE O LA IZMA 31, QUE COMENZABAN CON UNOS TRAGOS EN LA BOMBA BAR O UNOS COMBINADOS EN EL MOCAMBO, ABAJO EN LA CALLE CAMILO HENRÍQUEZ.

RECUERDO ESA VEZ QUE ESTABAMOS EN EL ROMA COMIENDO EMPANADAS FRITAS Y HACIENDO HORA PARA LUEGO PARTIR A UNA DE LAS FIESTAS DE ANTROPOLOGÍA . YO ANDABA CON ALGO DE PLATA Y PASÉ A COMPRAR UNAS BOTELLAS DE PISCO PARA LLEGAR CARGADOS A LA FIESTA. NUNCA NOS HABÍAMOS PESCADO MUCHO, PERO ESA NOCHE LORETA SE SENTO JUNTO A MI EN EL RESTAURANT Y ME CONTÓ ALGUNAS HISTORIAS DE SU VIEJO. ME DIJO QUE SABÍA QUE YO ESTABA PINTANDO Y QUE LE GUSTARÍA CONOCER ALGO DE MIS TRABAJOS, PUES SÓLO HABÍA VISTO ALGUNOS DE LOS AFICHES QUE YO DISEÑABA PERIÓDICAMENTE PARA LAS FIESTAS DE LA UNIVERSIDAD. SE VEÍA HERMOSA. SUS OJOS BRILLABAN BAJO EL PELO TOMADO Y VESTÍA UNOS JEANS AJUSTADOS A LAS CADERAS Y UN CHALECO DE LANA CHILOTA QUE ELLA MISMA HABÍA TEJIDO. CREO QUE ÉSA FUE LA PRIMERA VEZ QUE LE PEDÍ QUE POSARA PARA MI. RECUERDO QUE NO DIJO NADA, SÓLO SONRIÓ Y ME TOMÓ DE LA MANO SACÁNDOME A CAMINAR A LA FRÍA NOCHE VALDIVIANA.

PASAMOS TODA ESA LA NOCHE JUNTOS Y CUANDO NOS FUIMOS DE VUELTA A CASA, NOTÉ QUE ALGO HABÍA CAMBIADO ENTRE NOSOTROS. AÚN ESTABA OSCURO Y AL DEJAR EL CAMPUS CONFUNDIDOS ENTRE EL GRUPO DE GENTE QUE SALÍA DE LA FIESTA, PASAMOS JUNTO A UNAS CASAS DE LA FACULTAD DE BIOLOGÍA MARINA. LORETA ME PIDIO QUE LA ACOMPAÑARA. NOS SEPARAMOS DEL GRUPO Y CAMINAMOS ENTRE LAS CASAS DE LA FACULTAD, HASTA UN PATIO DE PASTOS MUY ALTOS DONDE LORETA ME TOMÓ DE LOS BRAZOS Y ME CONDUJO HASTA ELLA. CONFUNDIDOS ENTRE LA MALEZA NOS AMÁMOS EN SILENCIO UNA Y OTRA VEZ, HASTA ALCANZAR LA FELICIDAD DEL AGOTAMIENTO. DOTADA DE FUERTES Y LARGAS PIERNAS EL PORTE DESNUDO DE LORETA BRILLABA ENTRE LA HUMEDAD DEL MATORRAL, FROTÁNDOSE JUNTO AL MÍO Y EXHALANDO CON CADA ORGÁSMO UN SUAVE OLOR A MURTA.
ENTONCES ELLA BUSCABA ANSIOSA MI SEXO CON SU BOCA, PREPARÁNDOLO NUEVAMENTE PARA HUNDIRLO EN SU PROFUNDIDAD ARDIENTE Y FUGITIVA. ASÍ, ENTRE LOS GEMIDOS GANOSOS DE QUIENES SE DESEAN Y AL FIN SE ENCUENTRAN, NOS POSEÍMOS HASTA ENTRADA LA MADRUGADA.

CON LAS PRIMERAS LUCES ATRAVEZAMOS EL PUENTE QUE CONDUCE DE VUELTA A LA CIUDAD Y ENTONCES ELLA ME INVITÓ A DORMIR A SU CASA, UNA ANTIGUA CASONA VALDIVIANA UBICADA EN GENERAL LAGOS, CERCA DE LOS BARRIOS BAJOS. DORMIMOS JUNTOS EN EL TALLER DEL PINTOR, ENTRE ACUARELAS A MEDIO TERMINAR Y EL HERMOSO CANSANCIO DE NUESTROS CUERPOS DESNUDOS.

-TÓMAME UNA FOTO- ME DIJO, TIRÁNDOSE DESNUDA SOBRE EL SOFÁ. SE VEÍA HERMOSA Y SU PIEL RELUCÍA CON LA INTENSIDAD VOLCÁNICA DE UNA DIOSA ITALIANA.

LORETA Y YO NOS SEGUIMOS VIENDO, PERO A PRINCIPIOS DE LOS AÑOS 90 SU PADRE ENFERMÓ GRAVEMENTE Y TUVO QUE INTERNARSE EN UN HOSPITAL DE SANTIAGO. LORETA LO ACOMPAÑO EN TODO MOMENTO, VIAJANDO Y LIDIANDO CON LOS ASUNTOS DE FAMILIA Y OCUPÁNDOSE DEL TRATAMIENTO DEL VIEJO. CON LOS MESES SUPE QUE ÉL HABIA MUERTO. Y YO EMIGRÉ A VALPARAISO Y NO SUPE MÁS DE ELLA.

CON EL TIEMPO VOLVÍ A VALDIVIA A EXPONER MIS PINTURAS EN EL MUSEO DE ARTE CONTEMPORÁNEO. UNA NOCHE DE SÁBADO ESTABA EN UNA LIBRERÍA ESCOGIENDO UN LIBRO PARA EL HIJO DE MI NUEVA PAREJA, CUANDO VÍ ENTRAR A LORETA. TRAÍA UN VESTIDO DE SEDA HINDÚ QUE LE CAÍA DESTACANDO SUS FORMAS HASTA LAS CADERAS Y LUEGO SE EVAPORABA LIBREMENTE HASTA EL SUELO.
CAMINO HASTA MI, NOS SALUDAMOS CON EMOCIÓN. ME CONTÓ QUE HABÍA COMENZADO A PINTAR, USANDO LOS PINCELES Y LOS COLORES QUE HABÍA DEJADO SU PADRE. CONVERSAMOS LARGAMENTE. ME DIJO QUE IRÍA A VER MI EXPOSICIÓN Y ME REGALÓ UNA DE SUS PEQUEÑAS ACUARELAS .YO LE ENTREGUÉ UN LIBRO DE POEMAS QUE HABÍA RECIÉN PUBLICADO. LE DIJE QUE QUIZÁ MÁS DE ALGUNO DE ESOS TEXTOS LE TRAERÍA RECUERDOS, ELLA SE RIÓ Y ME TOMÓ DE LAS MANOS. NOS ABRAZAMOS. AL DESPEDIRNOS, PROMETÍ UN DÍA ESCRIBIR ALGO SOBRE AQUEL VITAL REENCUENTRO.

MÁS TARDE ESA NOCHE, YA EN EL BUS DE VUELTA HACIA VALPARAÍSO, DESCUBRÍ DENTRO DE MI CHAQUETA AQUELLA FOTO QUE AÑOS ATRÁS YO MISMO LE HABÍA TOMADO A LORETA. ELLA LA DESLIZÓ EN EL BOLSILLO SIN QUE ME DIERA CUENTA Y CON ELLO SE ENCARGÓ DE TRANSFORMAR ÉSE ABRAZO EN EL RECUERDO DE UN MOMENTO INTENSO QUE NOS VOLVIÓ UNIR POR UN INSTANTE.

SIN SIQUIERA PERCATARNOS, UNA PUERTA SE ABRIA ALLÍ HACIA EL PASADO INDICÁNDONOS QUE LOS HILOS INVISIBLES DE LA VIDA PUEDEN VOLVER A PONERSE EN MARCHA, CRUZANDO UNA Y OTRA VEZ EL DESTINO AMBIGUO DE SUS PERSONAJES.